El supo el momento en que lo había superado todo, fue cuando no la odiaba, cuando la indiferencia se hizo reina en sus sentimientos.
Y es que aprendió que erradicar sentimentalmente a las personas aunque no se lo merezcan, es humano siempre y cuando sea por la propia supervivencia.
Y es que la justicia sigue siendo subjetiva.
jueves, febrero 22, 2007
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2 comentarios:
No es fácil cambiar odio por indiferencia. Algunos no lo logran nunca, así que, felicidades por sobrevivir.
Un beso
A mí aún me queda algo para llegar a ese punto. :-(
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